El Domingo 24 de Noviembre me desperté temprano para preparar las cañas, las provisiones y rehabilitar algunos señuelos que me gustan mucho para llevar al arroyo que vamos siempre con mi viejo…
Habíamos coordinado, previamente, con el puestero Rubén como hacemos siempre para avisarle sobre nuestra visita. Teníamos pensado llegar al lugar después de las 13:30hs para pescar unas 3 horitas, solamente, y volver a nuestra casa. El día se presentaba bastante ventoso, no lo hacía propicio para la pesca con señuelos en ese ámbito que conocemos bastante, pero así y todo a pesar del viento estaba bastante soleado así que decidimos ir igual. A sabiendas que le teníamos fé a un spot dónde el agua se presenta calma y los ataques en superficie se dan habituales.
Después de pensar si iba a llevar el equipo de bait o spinning opte por este último. Casi siempre sucede lo mismo en mi elección, soy fanático del spinning a pesar de arrancar después en esta modalidad y primero en el bait. Más que nada por las sensaciones que transmite la estrella del reel en la pelea y, en mi caso, para darle vida a señuelos light o ultra light que uso bastante en esta modalidad.
Opte por llevar mi equipo preferido: caña sumax fireflag 8 17lbs de acción media en 6 pies con reel penn fierce 2000 cargado con multi daiwa de 8 hebras. Un equipo que, a pesar de su costo, es el que más cómodo me resulta, no lo cambio después de probar otros equipos mas caros y mas baratos. El lugar al que vamos es el que visitamos usualmente y en el cual tenemos permiso, es un campo cercano a La Plata, a unos 45 minutos de viaje. A pesar de la cercanía es un lugar soñado y bastante virgen en cuanto a la pesca, lleno de vida silvestre (nutrias, carpinchos, etc.). Esto habla de su buena conservación).
El arroyo dentro del campo está cercano a la casa y el pasto es bien corto, con lo cual el vehículo se deja al lado del mismo. La pesca se realiza totalmente de orilla sin ni siquiera ensuciarse, aunque también es posible ubicar algunos spots más adentrados como par a entrar con waders. Decidimos ubicarnos en la zona de pajonales del arroyo, lugar en el que había bastante reparo del viento aunque de todas formas se hacía sentir bastante. Opté por iniciar los tiros con las gomas zman color blanco tirando hacia las estructuras de los pajonales pero me dificultaba el viento que en algunas ráfagas venía de frente.
Había que ser bastante preciso para evitar enganches. No tardaron más de uno o dos tiros que comenzaron los ataques en superficie. Después de algunas capturas optamos por volver hacia el puente que cruza el arroyo y encararlo por el otro lado para poder tirar sin el viento de frente. En una anterior visita, desde ese lado, habíamos obtenido varias capturas. A pesar de que llevamos varios señuelos duros generalmente opto por usar solamente señuelos blandos, más que nada por la comodidad de llevar varios en una riñonera y poder realizar cambios rápidos.
De un momento para otro el viento se tornó bastante fuerte y en contra nuestro. En éste caso estábamos algo cansados como para cambiar de lugar al reparo. El pique en superficie no se sentía tanto y se optó por usar gomas lastradas havoc pit boss para tentarlas bajo el agua. Aunque no se dieron muchas capturas en profundidad, sólo dos, fueron las de mejor porte rondando los 2kg ambas.
Algunos de los señuelos que también funcionaron en superficie fueron las ranitas color negro de marca pancora y una mini rat de badline color rojo, la cual sorprendió porque generalmente la considero mala para clavar las tarus por la ubicación de los anzuelos. También la clásica moss boss en color verde y negro dio resultado. Después de unas tres horas de pesca, a eso de las 17:30hs, decidimos volver porque el viento ya era insoportable y el agua estaba muy picada.
Aprovechamos mucho las salidas con mi viejo a éste lugar porque el permiso es acotado, no siempre podemos ir y cuando vamos con el permiso hay que aprovecharlo totalmente.
Gentileza de Pablo Macedo