Seguimos de cuarentena pero les propongo algo: salgamos de la pesca en sí con la imaginación…
Imaginemos desde el comienzo, desde ese momento que durante toda la semana pasada estuviste revisando las líneas, rearmando esas que estaban un poco vieja o como buen obsesivo de la pesca (cómo yo jajaja) ya estaban un poco marcadas. El por qué no armaste esa línea con las boyas que venías con ganas de comprar desde el año pasado.
Cuando empezas a elegir que aparejos ibas a llevar… que colores, pensando en poder abarcar todas las situaciones que se te puedan llegar a presentar. Después de la abstinencia de más de un mes de ir a pescar no podés dejar nada librado al azar.
Estás sin dormir desde anoche porque la ansiedad de estar pescando te supera.
Te llega el mensaje de ese amigo para que salgas, que ya está llegando para pasarte a buscar pero no te aguantabas y estabas esperándolo afuera. Se suben y no hablan de otra cosa que lo que va a ser ese día soñado. El día que vienen esperando desde que empezó la cuarentena. Mates de por medio por dentro pensas, “nunca se me habían hecho tan largos estos kilómetros” y atinas a decirle a tu amigo, “che tan..” y te completa porque le pasa lo mismo que a vos “¿…lejos quedaba está laguna?. Pensaba en lo mismo jajaja. Mientras paran a comprar mojarras y eso que era un sueño ya va a tomando forma de realidad.
Entre risas y mates ya están ahí a punto de ponerse el wader o subirse al bote. Ya no importa el frío, si hay que remar, la luna, la comida, nada. De pronto se encuentran ahí, en medio de la laguna. Agarras la primer mojarra y la encarnas, te tiemblan las manos de la ansiedad como el primer día que te enseño tu viejo.
Respiras profundo, y miras la imagen como la de la foto y decis: De acá en adelante los dejo seguir el viaje y soñando a cada uno de ustedes. Los leo…
Espero que les haya gustado el juego. Gracias por acompañarme en esta hermosa salida de pesca virtual, y #quedateencasa para en un futuro no muy lejano podamos disfrutarla juntos!!!
Gentileza de Va Plomo