Sigo navegando río arriba y sinceramente no puedo mirar nunca hacia atrás, cuando veo esa punta de barranca en el horizonte tengo que ir a ver qué hay a la vuelta...
Amo descubrir nuevos lugares del río, hoy la pesca paso a un segundo plano. Con mi hermano del río y el Colo compartimos su primera pesca y creo que van a hacer unas cuantas más. Fuimos a buscar el suru, al mismo lugar, pero con la idea de dormir a la tarde y pescar durante toda la noche. Comimos y dormimos una siesta abajo de unos sauces grandes.
Sinceramente Yo no pude dormir pero disfruté el silencio al melodía de la naturaleza a pesar de ese abejón, no sé cómo se llama, que me hacia pensar que el vecino estaba cortando el pasto. Los sábalos estaban a los coletazos, increíble la cantidad que había con el río planchado. Sentado en la barranca tenía primer plano.
Salimos directo a hacer la primera gareteada, en el mismo mismo lugar, pero después de unos cuantos intentos no tuvimos ni un pique. Como aprendí de mi amigo el Chinito Ramírez: ” garetear te hace ver el río de otra manera”. En una de esas gareteadas hasta me imaginé anclado en ese lugar. Capaz que piensen que este medio loco y… puede que si, pero en ese mismo momento es donde siento que el río habla y me llamó.
Ya caía el sol y ahi, en ese momento del atardecer mágico, empezó todo. Tiramos con una morenita bien viva, largamos unos metros, y mientras escuchábamos tranquilos la naturaleza, sentí un toque.. llevada y trabas del reel. Ni te diste cuenta pero ya estás parado.Cañazo firme y seco para que llegue esa corrida ¿de quien? Del bigote loco: un suru.
Gentileza de Braian Segura