A veces hay emociones que son difíciles de transmitir. En mis años de pescador he tenido la suerte de recorrer miles de kilómetros por el agua, fundamentalmente navegando mi zona, pescando y haciendo pescar…
Recuerdo las palabras de los viejos pescadores cuando decían: “Acá antes había pacúes y surubiés grandes sacabas de la costa” y otras cuantas vivencias que el hombre se encargó de destruir. Una tremenda alegría me produce ver un río que está vivo, que con el tiempo la sabia naturaleza repara los errores que los seres humanos cometemos.
Debemos aprender la lección y CUIDAR, CUIDAR y CUIDAR. Depende de todos nosotros, de aportar cada uno nuestro granito de arena. Esta vez logre un lindo pacú en nuestra zona y con señuelo (una banana raptor), no es algo que muchos tengan la suerte de vivirlo… Y Yo, junto a 4 pescadores, fuimos los afortunados partícipes de esta historia. Como corresponde… EL PACU ROSARINO FUE DEVUELTO AL AGUA!!!! Otro de los momentos emocionantes que me tocó vivir, fue verlo irse con total vitalidad. La alegría del final así lo demuestra. ¡¡¡GRACIAS RIO PARANA POR TANTO!
Rosario sigue de parabienes en cuanto a la pesca deportiva. Las condiciones son más que favorables para la práctica de la pesca con mosca y señuelos. Aunque a veces debemos cambiar lar “coordenadas” de pesca, los dorados y chafas siempre están. La buena noticia es que los surus están retomando su actividad habitual ya que el río se ha estabilizado y con buen caudal.
Gentileza de Lucas Santangelo
