Señuelos de Autor

¿De qué hablamos los artesanos cuando hablamos de “Señuelos de Autor”? De la uva al vino existe la misma distancia que de un taco de madera a un señuelo artesanal…

La diferencia es que al vino, en general, lo queremos para compartir con amigos en momentos de relax y dispersión, haciendo alguna actividad que nos aglutina, donde la embriaguez se confunde por momentos con la felicidad compartida. En cambio, al señuelo… bueno, en principio parece no haber tanta diferencia.

Un señuelo artesanal comienza siendo un desafío de alguien que se sintió tentado a probar que, ademas de enhebrar una lombriz en el anzuelo, el tipo era capaz de agarrar un palo de escoba y hacer ese señuelo que vio en internet. Fuimos y seremos muchos los que vimos en este elemental cabo la posibilidad de hacer un simple oreno.

Todos los artesanos de señuelos pasamos por una etapa de aprendizaje inicial donde no faltaron los fracasos. Donde el trabajo se hace con mas ilusiones que certezas y la mayor ilusión será siempre que. en la próxima salida. ese palito tallado sea un éxito. Muchas veces lo logramos de entrada, en otros casos no.

El problema reside en que la información para hacer un señuelo, si bien no es mucha y tampoco es física cuántica, es lo suficientemente copiosa como para que la ansiedad nos gane. Entonces clavamos la trincheta en la madera pensando donde vamos a conseguir el alambre, imaginando como vamos a fabricar la paleta sin saber bien donde irá el contrapeso y mirando de reojo las pinturas de uñas de quien tengamos cerca nuestro. De todo eso junto en un mismo momento saldrá un cranck, un minnow o lo que sea.

De a poco, esa información se va ordenando y se empieza a asociar con la clasificación de los diferentes tipos de señuelos que existen. También aparece otra variable, que no es ni más ni menos, de que tipo de señuelo necesito para la pesca que hago. Llegado a ese punto, el artesano tiene la suficiente información como para adaptar madera, alambre, plásticos, plomo y pintura para crear su señuelo en función de sus necesidades… en función de sus lugares de pesca e inclusive en función de su equipo de pesca. Agrego algo mas subjetivo…. en función de sus gustos!!!!

Acá señores este tipo que arrancó sacándole punta a un palo de escoba logrará, para su necesidad, su lugar, su equipo y su gusto el mejor de los señuelos. Esos que nunca estarán colgados en los escaparates de las casas de pesca porque no son mercancía de intercambio comercial… son maderas talladas, señuelos que taparon de escamas a sus amigos. Son el fruto de volcar toda esa información, pasión y todas las ganas a un pedazo de madera. Esos son los señuelos de autor!

Retomando entonces el inicio de la nota, tal vez deberíamos aprender que saborear un buen vino no depende solo de saber de que afamada bodega proviene, sino saber que el origen de la vid, la nobleza de las barricas y la experiencia del vinicultor nos brindan un producto de calidad. Que para poder descubrirlo, deberemos apelar a nuestra experiencia de sommelier.

He recurrido a mis amigos artesanos para que faciliten fotos de sus señuelos con el fin de ilustrar esta nota. La cantidad de material recibido es tanto que sería imposible exhibirlo todo. Todos estos trabajos han sido realizados artesanalmente y producto de la obsesión, esmero, pasión y las ganas de superarse. Cada uno tiene su historia, tendrá su historia a futuro y sabrá devolverle en satisfacción el empeño empleado. Es que fabricar un señuelo es fabricar una ilusión.

Estimado lector, mire estos trabajos sin compararlos con los señuelos comerciales. Pueden ser parecidos, pero no lo son. Aprenda a valorar las diferencias que hacen a estas tallas únicas y en la mayoría de los casos irrepetibles. Observe que algunos fabricantes ademas de su impronta, agregan su marca en los trabajos. Apoye esta iniciativa, incorpore señuelos artesanales a su caja de pesca y no se verá defraudado.

Si fabricar un señuelo artesanal es fabricar una ilusión, tal vez usarlos sea hacerla realidad.
Gentileza de Telmo Abadia en ArtesaniasquePescan