Orden Lamniformes
Familia Triakidae
Este esbelto tiburón que llega a alcanzar el metro de longitud es el mas habitual de nuestras costas. Habita desde Brasil hasta la Patagonia, en aguas de la plataforma continental, desplazándose por lo general en las cercanías del fondo.
Presenta una dentadura muy curiosa: sus dientes son planos, no cortantes, dispuestos en forma de “pavimento”, con los que tritura los caparazones de cangrejos y otros crustáceos de que se alimenta, aunque incluye también pequeños peces y moluscos en su dieta.
Su lomo y dorso es de color gris uniforme, en los costados tiene pequeñas manchas de color pardo y vientre blanco. Con dos aletas dorsales, sin espinas, aleta anal chica y cinco hendiduras branquiales. Variedad muy interesante para el pescador deportivo, por lo sutil de su pique y la fuerte lucha que ofrece luego de ser clavado, prefiere los filetes alargados de pejerrey.
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De reproducción ovovivípara, pare unas pocas crías de unos 25 cm al nacer, luego de una gestión de 10 a 11 meses. Hay en nuestras costas otras dos especies del genero Mustelus, de características semejantes al gatuzo y menos frecuentes que éste. No es raro que los pescadores confundan a esta especie con el cazón (Galeorhinus galeus), otro tiburón costero de pequeño tamaño, aunque algo mayor que el gatuzo, del que se distingue fácilmente por tener dientes triangulares y cortantes. Muy usado en el pasado para obtener vitamina A de su hígado, hoy es salado y vendido como “bacalao criollo”
Fuente: 100 peces Argentinos (Hernan Laita – Gustavo Aparicio)
