Un articulo que escribí hace unos años decía que uno debería ir a pescar cuando debe y no cuando puede, es decir cuando las condiciones climáticas (viento, temperatura, etc) sean optimas para la especie que uno quiere pescar; pero lamentablemente los compromisos laborales hacen que uno vaya cuando puede…
Llegamos a Melincue el Domingo temprano invitados por Mariano Alegre (El pez gordo), guía de los mejores de ese espejo. Había una cola como de 3 cuadras dado que no dejaban bajar ninguna embarcación debido a los 40 km de viento que había en ese momento, pronosticaban que iría bajando en el transcurso de la mañana. Recién tipo 9.30 am dejaron bajar a las embarcaciones mayores a 5,50 m.
El Cocodrilo Fishing Team estuvo compuesto este viaje por quien escribe, por Raul Barera, Carlitos Crisci y el invitado de lujo que nos acompaño: Valentin Di Santi conductor junto a su hijo Pablo del programa de tv Tiempo de Pesca. Mariano nos llevo a la costa donde nacía el viento, en la parte baja (muchos palos hundidos, el que no conoce debe navegar con tremenda precaución), donde empezamos a garetear hasta que apareció el primero.
Usando brazoladas a 15 cm, bien arriba, sentimos una explosión en el agua y su posterior corrida, fué el primer peje.. un peje de 500 gramos, vigoroso y peleador. Todavía un poquito flaco pero no como en otras lagunas (al final de la jornada todos fueron de 400 a 850 gr el mas grande). Durante dos horas hicimos garetes cortos en partes poco profundas sacando, en el lapso de dos horas y media, 40 pejerreyes espectaculares hasta que el viento se hizo protagonista de la jornada otra vez.
Se plancho la laguna y con ello el pique mermo casi a cero, digo casi a cero por que estaba mi línea a dos metros de la embarcación y empezó a picar, una sardina decía el resto del grupo pero vi la cola y cuando hizo la segunda llevada (ya sabiendo que era un peje y grande) lo clave al estilo mojarrera y lo subí al bote, un peje de unos 850 gr, el mas lindo de la jornada.
En verdad Melincue es una laguna Top, la calidad de pejerrey que obtuvimos mientras el vientos nos dejo fue tremenda, de realizar una jornada completa con el viento optimo hubiera sido la pesca de nuestras vidas, altamente recomendable.
Abrazo pescador, Luis Ventimiglia.
