Finalmente pudimos ir a relevar el famoso pesquero La Zona en Concordia, Provincia de Entre Ríos. Salimos el Domingo luego de un ligero almuerzo en familia, rumbo a esa provincia tan linda y codiciada por nosotros los pescadores deportivos. Arribamos al Lodge de La Zona, situado muy cerca del Río Uruguay, muy pintoresco e ideal para pescadores..
Nos recibieron con una magnífica picada y una cerveza helada, como siempre charlando de pesca, técnicas y del pique de los últimos días, climatología, estado del agua, etc. Nos comentaba Lucas Reinoso, quien nos recibió, que el río está algo turbio, producto del agua que viene bajando del Norte, y eso complica un poco la pesca, aunque nada es imposible en este paraíso de la pesca.
Nos levantamos bien temprano a la mañana, para armar equipos, alistar cañas, reeles y ver que señuelos usaríamos. El dilema del pescador, siempre queremos tener todos los muñequitos posibles, si bien usaríamos de media agua también probamos con algunos de profundidad, con cierta cautela para no enganchar en alguna piedra. Un espectacular desayuno de campo con todo lo que necesitábamos para juntar fuerzas y la energía que nos demandaría una pesca de alto calibre como es esta. Arrancamos a las 8AM puntual en el muelle de embarque, nos cargaron las bebidas, bártulos, equipos y arrancamos. Una corta navegación, puesto que pescaríamos media jornada fuera de la zona (por la mañana), y a la tarde en la zona de la represa.
Volvimos al embarcadero cerca de las 12 AM, para almorzar, reponer bebidas frías y hacer el cambio de embarcación, para ir directamente al área específica de la represa. No sabemos si era la ansiedad o que el tiempo vuela, pero a las 12:30 hs ya estábamos tirando nuestros señuelos en el agua, y ahí ya la cosa cambio radicalmente. Sabíamos con que nos íbamos a encontrar, asi que pusimos equipos algo mas pesados, sin exagerar, pero listos para la guerra. Cañas de spinning pesado Shimano, reeles Stella, Penn, todos guerreros ideales para combate pesado. Los señuelos utilizados fueron los infalibles Magnum de Rapala, Century Agressor, Salminus y unos Arashi que se llevaron las palmas de todos! Llegamos al lugar, primero sondeamos la costa argentina a unos 50 metros de la costa y dejando derivar la embarcación practicamos una pesca al golpe contra la misma.
Los piques no se hicieron esperar, mucha actividad de doradillos que rondaban los 1-2 kg, muy activos y vigorosos. En ningún momento mermó la faena, no nos dieron respiro, y aprovechamos para achicar los equipos al máximo y disfrutarlos como corresponde. Un baitcast muy liviano, con señuelos de media agua fueron los que se llevaron los aplausos, los colores fluor, cardenales y con brillo eran los que tenían mayores respuestas, así que aprovechamos y nos divertimos como locos, hasta que llegó la hora de la verdad… clavamos 3 dorados muy grandes de aproximadamente 8 kg, los cuales izamos con mucho cuidado para realizar las fotos correspondientes, y devolverlos a su hábitat con el menor daño posible.
Recomendamos totalmente a La Zona Fishing Lodge, guías muy preparados, excelentes navegantes y pescadores, a disposición de sus clientes en todo momento, muchísimas gracias a Roberto y Alejandro por la guiada de mañana y mediodía respectivamente, a Lucas Reinoso por la recepción, consejos, charla y puesta a punto de todo, para que salga esta hermosa jornada, y al señor Hector Bradanini por brindarnos la posibilidad de realizar la pesca que todo pescador deportivo anhela, y sueña. Es grande el esfuerzo que se hace, kilómetros, cansancio, pero vale la pena, y les decimos a todos nuestros amigos y lectores, que vengan a La Zona, que no se van a arrepentir.
Nos cruzamos con turistas brasileros que vienen exclusivamente a pescar estos dorados, y lo repiten todos los años. Enamorados de nuestro país y los recursos que nos brindan. Hicimos varias remontadas, dado que la correntada es muy fuerte, la compuerta estaba con sus vertederos abiertos, agua turbia, alta, en fin, todas condiciones desfavorables para la pesca, pero que en este lugar parecen no aplacar el instinto cazador de nuestros bellos dorados. En una ráfaga de piques pudimos izar los mas grandes, siendo la mayor captura del dia un ejemplar que superó los 15 kg, y dio una dura batalla antes de entregarse, puesto que en este ámbito están con comida a la orden del día… corriente a su favor y piedras muy cerca, todos factores que requieren máxima precisión de parte del pescador.
Realmente la jornada se nos paso volando, dicen que cuando uno hace lo que le gusta, no alcanza el tiempo, ni las palabras para expresar el dia que pasamos. Atención de primera, un ámbito muy lindo desde lo visual, el entorno, todo acorde para que los pescadores deportivos, encuentren en este ámbito, la paz y la diversión que buscan en cada salida.
Cuidemos el río, practiquemos siempre la devolución de los ejemplares, seamos solidarios con el pescador que viene atrás nuestro, un pez liberado hoy es un regalo para otro colega mañana!
Nota de Leonel de Palo
Gentileza del Turco Daniel Almaraz de Salimos a Pescar.
Gentileza del Turco Daniel Almaraz de Salimos a Pescar.