Esta fue una salida de pesca muy particular: era el cumpleaños de Martin y su primo Fabián que como regalo le quería organizar una salida de pesca sorpresa, me pareció una idea original..
Fabián le toco timbre a las 3 am – la familia estaba al tanto pero no el cumpleañero -, se despertó muy dormido sin entender nada hasta que cayó y no lo podía creer. Preparo todo muy rápido y salieron. Fabián con la excusa de que tenía que pasar por un cajero rumbeo para mi casa a buscarme – otra sorpresa para Martín que seguía creyendo que estaba dormido -. Ya todo listo salimos los cuatro, ya que el pequeño gran pescador de Facu – hijo de Martin – también nos acompañaba.
LA GRAN INCÓGNITA
El Destino era recorrer el sur Entrerriano en busca de nuestras amadas Hoplias. El día se iba a presentar agradable con un bajón de temperatura con respecto a días anteriores y con algo del molesto viento que siempre complica esta pesca. Llegamos alrededor de las 9m al primer point, estaba muy expectante ya que en nuestra última visita a este sitio estaba completamente tapado de vegetación, densas capas de repollos y lentejas de agua que hizo casi imposible la práctica, solo pudimos pescar en un ojo de agua literal (Ver relato de esa experiencia).
Los fuertes vientos de días anteriores pensaba que podrían haber modificado el ámbito, baje del auto apresurado para examinar el lugar y no lo podía creer… se había desplazado la vegetación dejando los mejores lugares amplios y claros para pescar, voltee y les dije a los muchachos: – “Hoy la rompemos“. Así fue que ya al primer casteo se dió un ataque fallido, no hay nada mejor que empezar así. Seguí insistiendo en el mismo lugar ya que allí había una pero el viento complico mucho la pesca en este ámbito en particular debido a la vegetación sub-acuática que hace casi exclusivamente buscarlas en superficie, se puede pescar con señuelos que bajen un poco pero tiro a tiro hay que limpiarles los triples y es muy engorroso, el viento hace que el agua se crispe y les hacen fallar ataques mas de lo normal.
Había llevado para probar toda la línea de señuelos VML Animal Lures para testearlos. Al tercer intento tomó el Hulk color amarillo, una de las lindas.. que hermoso empezar así con una robusta negra del otro lado de la línea. Caña arqueada y adrenalina disparada pensando en cómo estará agarrada del señuelo, cuando la canse y la arrime no lo podía creer, si bien era una Tararira de buen porte se había tragado el Hulk como si fuera un confite y es un señuelo grande. Se acercó Martin a retratar el momento y me recordó lo que hacía solo minutos le decía “Hoy la rompemos“. Seguimos con infinidad de ataques y capturas, muchas chichas. Alegra ver tanta población de juveniles, estaban super activas y no tenían miramientos a la hora de atacar, no les importaba el tamaño del señuelo, nada las intimid , que lindas son por favor !!!!
TESTEANDO SEÑUELOS
Realice la pesca 100% con los VML para testearlos bien, como les decía arranque con el Hulk que en un rato quedo bien rayado con muchas capturas pero su forma es aguda y por cómo estaba el agua crispada por el viento necesitaba algo más de choque, así que puse el nuevo Predator que Stickeandolo mueve muchísima agua como también dejándolo quieto un segundo, con un seco y corto golpe de caña hace un chasquido irresistible. Sin dudas fue la estrella de la jornada, levantó todo: chicas, medianas y grandes. Al rato quedo con las marcas más bonitas del mundo. Los muchachos estaban haciendo lo suyo: Fabián era su segunda vez con señuelos, la primera en spinning y ahora ya saltó al bait, con un par de indicaciones de regulación del reel anduvo de primera; Facu creo que era su cuarta vez y Martín ya está encaminado.
Con tanta actividad era un día excelente para el aprendizaje. Así fue transcurriendo la mañana, la pesca ya estaba hecha e increíblemente estábamos secos, no hizo falta vadear, nos volvimos al auto para reponer fluidos y sólidos extasiados de la pesca hecha hasta el momento y del festejo de cumpleaños. Mientras almorzábamos cayeron varios pescadores amigos, tras los cordiales saludos y la pregunta de cómo estaban las dientonas se internaron a pescar y después almorzar. Ya con el febo en su máximo esplendor, brindándonos una cómoda tibieza que no estuvo por la mañana, decidimos vadear lugares claves a ver si dábamos con las grandes que no estaban fáciles.
Para arrancar la tarde le di a Martín un Hulk negro para que lo pruebe. Después de una larga caminata que sirvió para bajar la comida llegamos al lugar de vadeo, antes de ingresar al agua hicimos unos tiros sobre la orilla donde tuvimos algún que otro ataque y luego de un par de capturas fuimos ingresando. Siguieron los ataques y capturas, hicimos un doblete con Facu a pesar que seguían muy activas las chicas y medianas. Fue hora de probar el “Diablo”, bastante más chico, que debutó de forma espléndida. Luego lo saque y volví al “Predator” por miedo a que prendiera una grande y lo tragara demasiado haciendo peligrosa la extracción. Martin enloquecido con el accionar del “Hulk”, tuvo muchas capturas.
BUSCANDO LA CAPTURA QUE MARQUE LA DIFERENCIA
Así seguimos buscando las grandes que no aparecían. De pronto diviso un hueco tentador entre la vegetación, no quería errar el tiro, las grandes no llegan a grandes porque si.. son muy selectivas a la hora de comer y son bastante asustadizas y desconfiadas.
Tenía que presentar el señuelo muy bien, no quería que cayera al agua de golpe, la idea era que cayera en el borde de la vegetación y de ahí ingresara al agua en forma delicada y natural. Me quedé unos instantes a que me quedara un espacio de calma entre las ráfagas de viento y realice el tiro.. cayó justo como lo quería, suavemente lo fui sacando del espeso colchón de repollos hasta que tocó el agua y al primer movimiento explotó, solo pude saber de qué se trataba cuando la clave: era la que estaba buscando, una robusta negra.
Trate de dominarla entre la vegetación pero fue en vano, no la pude frenar y se metió debajo de las plantas, quedo ahí trabada y ya no sentía ningún movimiento en la caña. Temía haberla perdido. Comencé a caminar acercándome al lugar, no quería meter la mano, saque la pinza de punta y empecé de a poco a retirar vegetación agarrando el multi con la mano.
No sentía nada. Seguí escarbando hasta que vi la punta del leader, lo tome, hice fuerza tratando de sacarlo y nada (uso leaderes muy cortitos de 7 u 8 cm), saqué la mano y seguí con la pinza de punta limpiando la zona hasta que asomo las fauces de esta hermosura, estaba ahí !!!! Con cuidado le coloque el bogagrip y logre sacarla. Con esto coronamos una terrible pesca cumpleañera, todo una fiesta que quedará por siempre en nuestra memoria. Pesca 100% devolución.
Gentileza de Walter Gastaldi





