Resumiendo un poco el año taruchero se puede decir que se pesco casi todo el año tanto en las lagunas como ríos de la Provincia de Santa Fe – mi zona – no solo en la temporada pasada sino que también casi todo el Invierno, salvo dos semanas que tuvimos heladas intensas..
Casi conectando una temporada con la otra, las Tarariras permanecieron más activas que otros años pero con un par de variantes debido a varios factores como las crecientes y bajantes – principalmente -, que hicieron que la pesca fuera muy inestable.
Por ejemplo si hablamos de la “salida de la hibernación” en lagunas y ríos Santa Fe, las Tarariras se mantuvieron más activas que en otras provincias como Córdoba. Hicieron una transición casi instantánea, comiendo y atacando los señuelos de forma firme sin mayores problemas pudiéndolas pescar a flote, un modalidad que se disfruta mucho para esta especie.
También esta temporada se aprovechó mucho la ocasión para realizar testeos de varios señuelos nuevos que ingresaron al mercado como en el caso de Hoplias Lures con el Modelo Sapinho (ver) y Rata (ver), tuve la oportunidad de testearlo y logre decenas de capturas por días, cuestión que en la Provincia vecina no había tantas señales de las mismas salvo escasos avistajes de Tarariras tomando sol sin intención alguna de tomar los engaños.
Con la llegada de las primeras capturas ,a nuestra querida provincia de Santa Fe, en lugares de entornos con abundante vegetación empiezan las peleas por territorios de los grandes ejemplares, anticipando una pronta postura y llegando casi un mes antes que en otros lugares, donde los fríos y cambios climáticos hacían que la temperatura del agua se mantuviera baja retrasando así la activación de las Hoplias. Las misma hicieron una transición distinta casi saliendo del invierno y entrando en postura, se obtuvieron algunas respuestas más concretas que entrando en la temporada 2017-2018.
Finalizando este pequeño resumen, y ya entrados cronológicamente casi en temporada, podemos decir que hay una situación bastante complicada por la falta de abundante agua, hay pesqueros que corren riesgo por excesivas bajantes haciendo peligrar posturas tardías perdiendo nidadas, sumándole a todo esto la constante presión de parte de la Depredación. Por eso cuando pesquemos tomemos conciencia, pesquemos con devolución, respetemos cupos y vedas para poder seguir disfrutando a futuro de esta tan apreciada especie.
Gentileza de Gerardo Mastandrea





